Según denuncias, la adquisición contínua de almuerzos, postres e incluso suplementos alimenticios se estaría financiando a través de este fondo.
Un reporte de la Unidad de Investigación del programa ‘Punto Final’ en el canal 2 ha puesto de manifiesto que en el Ministerio de Vivienda se han usado con regularidad los fondos de la caja chica para pagar almuerzos, postres e incluso suplementos alimenticios.
A pesar de que en diciembre de 2021 se emitió una directiva que restringe el uso de la caja chica, se han detectado gastos en comidas que han llamado la atención. Entre enero y abril de este año, el despacho de Hania Pérez de Cuéllar en el Ministerio de Vivienda ha gastado aproximadamente S/1,300 (S/1,288.80 en total) en un total de 7 almuerzos para llevar, que fueron encargados al restaurante chifa Palacio.
Es cierto que hay gastos relacionados con la alimentación que pueden justificarse, como el ocurrido el 14 de marzo de este año, cuando se llevó a cabo una reunión de trabajo urgente debido a la emergencia causada por el ciclón Yaku.
Sin embargo, según la investigación realizada por ‘Punto Final’, el despacho de la ministra efectuó la compra de 10 botellas del suplemento alimenticio Ensure, 5 con sabor a vainilla y 5 con sabor a café, algunas de las cuales se adquirieron en una farmacia en Surquillo. En total, se gastaron S/108, y se especificó que la compra se destinó para el consumo del Despacho Presidencial.
Además, se informa que entre abril y junio se registraron gastos por un total de S/1,231 en cuatro almuerzos que incluyeron platos destacados de la gastronomía nacional y sus respectivos postres. Se destaca un gasto particular: una compra realizada el 21 de junio para una reunión que tendría lugar al día siguiente.
Al intentar obtener una respuesta del Ministerio de Vivienda y establecer una conversación con la ministra Pérez de Cuéllar o el funcionario correspondiente para aclarar las razones detrás de estos gastos, ‘Punto Final’ recibió un comunicado en el que se asegura que los gastos de la caja chica se ajustan a las normativas internas y que se realizaron en el contexto de reuniones destinadas a abordar situaciones de emergencia. No obstante, el programa ha observado que este patrón es exclusivo del Ministerio de Vivienda y no se repite en otros ministerios.